El sistema de gestión de baterías (BMS) es un sistema electrónico diseñado para monitorear, controlar y proteger baterías recargables, asegurando su operación segura y eficiente. El BMS juega un papel crucial en la gestión del rendimiento de la batería, especialmente en aplicaciones como vehículos eléctricos (EV), almacenamiento de energía renovable, dispositivos portátiles y sistemas industriales.
Las funciones clave de un BMS incluyen:
- Monitoreo : rastrea continuamente parámetros importantes de la batería, como voltaje, corriente, temperatura y estado de carga (SOC) para cada celda individual y la batería general.
- Equilibrio : las baterías consisten en múltiples celdas y, debido a las tolerancias de fabricación, cada celda puede tener capacidades ligeramente diferentes. Un BMS asegura que todas las células se equilibren igualando sus niveles de carga, evitando el sobrecarga o la descarga profunda de cualquier celda, lo que podría dañar la batería.
- Protección : El BMS proporciona protección al detectar y responder a los peligros potenciales, como el sobrevoltaje, el bajo voltaje, la corriente excesiva, los cortocircuitos y las altas temperaturas, lo que podría provocar problemas de seguridad o daños a la batería.
- Estimación de estado de carga (SOC) y estado de salud (SOH) : el BMS calcula y proporciona estimaciones para el SOC de la batería, que representa la cantidad de carga, y SOH, lo que indica la salud o el envejecimiento de la batería.
- Comunicación : en sistemas avanzados, el BMS se comunica con dispositivos externos (como cargadores, controladores o sistemas de gestión) para intercambiar datos y optimizar el rendimiento.
- Gestión térmica : el BMS puede controlar o interactuar con los sistemas de gestión térmica para garantizar que la batería funcione dentro de su rango de temperatura óptimo, evitando el sobrecalentamiento o el enfriamiento excesivo.
Al realizar estas funciones, un BMS garantiza que la batería funcione de manera segura, maximiza su vida útil, optimiza los ciclos de carga y descarga, y previene cualquier riesgo potencial como fugitivo térmico o degradación de la capacidad.